Puede parece una pregunta evidente, pero no lo es. Hay muchas finalidades en la educación y no da lo mismo una cosa que otra. No basta educar, sino tener un motivo y un horizonte claro… y siempre positivo!
Hay quien educa pensando que consiste solo en enseñar mucho, quien se esfuerza para que aprueben alguna prueba que les permita continuar estudios superiores, quien cree que lo fundamental es educar en valores o presentar una manera de vivir, quien considera central prepararles para un buen trabajo futuro,quien busca solo la fama de su escuela, quien se preocupa porque se lo pasen bien… y así podríamos seguir.
Demasiadas veces la escuela católica ha formado a dirigentes políticos o económicos que han sido un desastre para la sociedad.
«Para qué educamos» no es una pregunta retórica, sino fundamental para hacernos cada educador, cada centro educativo, cada institución… y también los escolapios que llevamos más de 400 años en esta preciosa labor… si está bien enfocada. 