En la vida la propia felicidad, el mayor servicio a la gente que queremos y que querremos, la satisfacción personal, el deseo del mismo Dios… es que cada persona descubra su vocación, su lugar en el mundo, el papel con el que puede ser más útil a los demás, el camino de su vida donde ser feliz haciendo felices a los demás.
La educación, la acción pastoral de todas las religiones, la misión de toda sociedad es conseguir que cada persona esté en el lugar donde debe estar, donde va a colaborar más y mejor, donde va a encontrar el sentido de su vida.
Los escolapios, expertos en educación, lo sabemos y queremos colaborar en esta finalidad tan fundamental para toda persona y toda sociedad.