Seleccionar página

El Señor nos llama a una entrega de la vida para dar vida de diferentes maneras: nadie puede esperar una certeza de que va a acertar el camino de su vida porque siempre es necesaria bastante confianza y mucha más generosidad, pensando más en lo que puedo aportar al mundo que lo que me gusta en cada momento… y así surgen las vocaciones que van dando vida a quienes más lo necesitan.