Cuando las priorizamos, entonces sí podemos lograr todos los objetivos, porque están claro los que orientan a todos los demás.
Sugiero que un buen criterio de priorización viene del logro de transformación social del entorno (en línea de solidaridad, atención a quien más lo necesita, respeto a todos…) y la transformación de las personas (felices, seguidoras de Jesús, solidarias, en comunidad eclesial y ojalá escolapia, formadas…).