Cuando comenzamos un nuevo año, es bueno tener claros los principales desafíos en los que nos encontrarmos.
La Orden marcó cuatro gen su Capítulo General de 2022:
- poner a Jesús en el centro desde la espiritualidad escolapia y una vida comunitaria renovada,
- seguir construyendo unas nuevas Escuelas Pías desde la interculturalidad e inculturación, la sinodalidad, la sostenibilidad integral y la participación,
- avanzando hacia el escolapio que necesitamos con una adecuada pastoral vocacional, formación inicial y permanente, y
- centrados en nuestro ministerio escolapio, sobre todo en el Movimiento Calasanz y la juventud, y desde la identidad escolapia de todas nuestras plataformas de misión.
La Fraternidad, en su Asamblea General de 2021, marcó dos: fortalecerse como red de comunidades que comparte el carisma con la Orden y resopnder a los retos de la misión escolapia en el mundo.
La Red Itaka – Escolapios, en su Consejo Asesor de 2021, indicó dos: impulsar el sujeto escolapio compartido y crecer en misión escolapia compartida.
El Movimiento Calasanz, como enfoque pastoral y red de grupos en proceso, es una prioridad de la Orden, la Fraternidad e Itaka – Escolapios, por ser un excelente complemento de la acción educativa, pastoral y social de todas las plataformas escolapias. 