Hace 62 años un grupo de padres de familia pidieron al arzobispo la fundación de un colegio católico para educación de sus hijos. El arzobispo conoce en Puebla a los escolapios y les hace la petición de fundar el colegio actual al que dieron el nombre “Carlos Gracida”, en honor de un sacerdote canónigo de buena fama educativa en el lugar.
Fuente e información completa con más imágenes en http://bitly.ws/KVSY