El 16 de mayo de 1992, después de un curso de funcionamiento y varios años previos de caminar como grupos y asociación Itaka en torno al colegio escolapio de Bilbao, las cuatro pequeñas comunidades existentes (la comunidad conjunta escolapia con religiosos y laicos, una comunidad procedente desde Catecumenado de adultos y dos comunidades del catecumando juvenil) aprueban el ideario de las comunidades de Itaka y, con ello, abren un camino que llevará cuatro años más a tarde al reconocimiento como Fraternidad.