La Iglesia ha ido definiendo a lo largo de su historia una serie de principios que el Papa Juan Pablo II publicó en un valioso documento, llamado «Compendio de la Doctriba social de la Iglesia». Lo encontramos en varios idiomas en https://www.vatican.va/roman_curia/pontifical_councils/justpeace/documents/rc_pc_justpeace_doc_20060526_compendio-dott-soc_sp.html
Aquí queremos destacar los siete criterios de dicernimiento que nos guían a los cristianos en la acción social de todos sus ámbitos:
- el bien común,
- el destino universal de los bienes,
- la subsidiariedad,
- la participación,
- la solidaridad,
- los valores de la verdad, la libertad y la justicia,
- y principalmente, la caridad.
Valorar el acontecer social desde estos principios permite construir la acción social teniendo al ser humano como centro y objeto de toda operación social. No se trata de un humanismo sin alma, sino de una opción eminentemente evangélica que parte desde la infinita dignidad humana.
