Hace alrededor de un año poníamos en marcha un nuevo camino con el lema de la campaña 2024-2025, “Abriendo Caminos”, una propuesta con la que invitamos a toda la familia escolapia a implicarse de verdad en la transformación social desde la educación y la justicia. Desde Itaka-Escolapios se han dado pasos muy importantes gracias al trabajo y la entrega de miles de personas que, en distintos lugares del mundo, construyen cada día una realidad más humana para todos.
Con ilusión y mucha solidaridad, la tarea compartida ha llegado a más de 16 países donde hay presencia escolapia, como Bolivia, Camerún, Cuba, España, Mozambique o Venezuela, entre otros. Niños y niñas, adolescentes, jóvenes, familias, educadores y voluntariado han tomado parte en proyectos de aprendizaje, solidaridad y justicia social, logrando transformar sus entornos cercanos y acercándolos un poco más al mundo que soñamos.
Gracias al compromiso de tantas personas, ha sido posible sostener y reforzar proyectos escolapios que apuestan por una educación de calidad, el desarrollo sostenible y el acompañamiento de quienes más lo necesitan. Se ha avanzado juntos en la defensa de los derechos de la infancia, en el cuidado del planeta y en la construcción de una sociedad más fraterna y justa.
Desde Itaka-Escolapios, va un agradecimiento enorme por haber formado parte de este proceso, por aportar tu tiempo y tus capacidades, por abrir caminos de esperanza y por seguir creyendo que la educación y la solidaridad son clave para cambiar el mundo. Gracias por cada detalle, cada aportación económica y cada actividad que ha permitido continuar la misión compartida.
Como cada año, se presentan los resultados de la campaña 2024-2025, una ocasión para reconocer todo lo logrado y el impacto generado entre tantas personas y comunidades. Y desde ahí, con la mirada puesta en la nueva campaña 2025-2026 “25 años extendiendo raíces”, seguimos cuidando y fortaleciendo esas raíces que nos sostienen.
