En esta fecha de Navidad, el Dios que se hace niño nos muestra que lo podemos seguir encontrando y acompañando en todos los niños e niñas, adolescentes, jóvenes y todas las personas que necesitan nuestra ayuda y de la solidaridad de toda la sociedad para construir un mundo como Dios quiere.
Aprovecha para recordarnos las personas que formamos parte de esta red escolapia: participantes en los distintos proyectos, voluntariado, profesionales, fraternos, religiosos… y muchísimos colaboradores.
