Dedico esta carta fraterna a una sencilla reflexión sobre la oración, con el deseo de invitarles a vivir con una mayor intensidad esta imprescindible dimensión de nuestra vida escolapia: ser personas de oración. Quisiera centrarme, sobre todo, en el ejemplo y enseñanzas de Calasanz sobre esta preciosa y apasionante dimensión de nuestra vocación: la vida espiritual.
Quiero basar mi reflexión en la oración colecta que hacemos siempre cuando celebramos la solemnidad de Calasanz. Dice así: “Señor Jesús, que has enriquecido a San José de Calasanz con la caridad y la paciencia para que pudiera entregarse sin descanso a la formación humana y cristiana de los niños; concédenos, te rogamos, imitar en su servicio a la verdad al que veneramos hoy como maestro de sabiduría”.
Encontramos la carta del P. General a los hermanos en https://scolopi.org/wp-content/uploads/2025/03/salutatio-2025-03-abril.pdf